martes, 17 de marzo de 2015

TECNOLOGÍAS CONTINENTALES

Aquí hablaremos de la evolución de las tecnologías en cada continente y de cómo la población se ha adaptado a ella.

El inicio de la historia de los ordenadores se remonta a 1822, cuando Charles Babbage diseño una máquina diferencial para el cálculo de polinomios. Tras esto inició un segundo proyecto que pretendía poder resolver cualquier problema matemático. La máquina funcionaba gracias a la máquina de vapor, pero al no estar suficientemente desarrollada la tecnología y la industria, su proyecto no funcionaba correctamente y la idea quedo en el olvido.

Otro personaje fue Herman Hollerith, que creó una máquina que introducía datos a una gran velocidad y que ayudo a rellenar el censo de 1890.


Ya por fin John Vicent creó el primer prototipo digital: El ABC Atanasoff-Berry-Computer. Postuló que debería de procesar la información en sistema binario, algo completamente distinto a las ideas anteriores.
Vicent sabía que su ordenador tenía el mismo problema: que era lento. Para solucionar este problema, creo un nuevo prototipo con su socio Maunchy. Llamaron al proyecto el ENIAC, el cual triunfó.
A este ordenador el matemático húngaro Neuman le incorporo un "equivalente" a una base de datos local y lo renombró como El Edvac.
Como es de suponer, donde está el poder y el desarrollo es en donde surgen los descubrimientos. Esto no es distinto en la informática, ya que como se ve a finales del siglo XIX Inglaterra estaba a la cabeza de la evolución industrial y luego, a principios del siglo XX le pasa el testigo a Estados Unidos.
Ahora bien ¿Cómo está distribuida la industria informática en la actualidad?
Sobra decir que son 4 empresas contadas las que están haciendo negocio de vender ordenadores y que mientras en América, Asia y Europa nos estamos lucrando de los lujos de un ordenador nuevo el viejo está siendo tirado en algún recóndito poblado 

Africano en el que se pegan por un trozo de cable porque es lo único que tienen para comer, por no mencionar las minas de coltán de las que no solo nos aprovechamos para ordenadores.

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